La programadora indígena, Gabriela Salas, quien se siente “orgullosa”, trabajó con Google para incorporar el náhuatl, la lengua originaria más importante de México, en su traductor y subraya que “lo esencial” es “rescatar” las raíces culturales.
“Soy una mujer indígena nahua”, se presenta ella, una también científica de datos de Chapulhuacán (estado de Hidalgo), quien menciona que ya contaba con experiencia en el ámbito de las lenguas originarias antes de su colaboración con la empresa californiana.
De hecho, algunas de sus charlas como divulgadora científica se centraban en la “importancia de rescatar” estos idiomas mediante la inteligencia artificial. Fue en ese momento que le interesó la oportunidad de colaborar con Google, que buscaba voluntarios para su sistema de traducción.
Google anunció la adición de 111 idiomas nuevos, incluyendo el náhuatl, lo que eleva a más de cien el total de lenguas disponibles. La desarrolladora proporcionó a la empresa “toda la información” que había recopilado a través de una base de datos que incluye “documentales, personas hablando en náhuatl y libros”, así como revistas y periódicos. De acuerdo con el Sistema de Información Cultural (SIC), el náhuatl es parte de la familia yuto-nahua y del grupo cora-nahua y, en la actualidad, lo hablan 1,586,884 personas.
Salas mencionó que invitó a sus amigos a utilizar el traductor que ya incluía el náhuatl. Fue en este contexto que la novedad de la herramienta y ella misma se hicieron virales, lo que le permitió considerar trabajar por la conservación de las demás lenguas originarias en México, que suman un total de 68, aunque, por el momento, no hay ninguna convocatoria abierta en Google para incorporar nuevos idiomas a su traductor.
“Aquí, lo importante es rescatar nuestras raíces”, finalizó.